Musical Piaf, Voz, Delirio, estudio del francés, cultura, Venezuela
En la sede La Castellana, la artista Mariaca Semprún y el escritor Leonardo Padrón compartieron con la comunidad que asiste a la institución cultural francófona los pormenores del montaje de este exitoso performance
La vida no es tan rosa y el gorrión de Francia, Edith Piaf, lo experimentó. Su vida y obra, presentada en el musical Piaf: Voz y Delirio, se convirtió en una vitrina para exponer la cultura e idiosincrasia francesa, al tiempo que impulsó las ganas de muchos venezolanos por estudiar el idioma galo en la Alianza Francesa de Venezuela.
“Piaf para Francia es lo máximo. Es un personaje muy importante para nosotros. Era obvio para la Alianza Francesa apoyar este espectáculo que gustó tanto. De hecho, tenemos nuevos alumnos que decidieron estudiar el francés después de haber visto el musical”ž comentó Anne-Marie Rousseau, directora y delegada general de la Alianza Francesa en Venezuela.
Tal declaración la emitió Rousseau en un encuentro llamado “Un Café con Piaf”, realizado en la sede de La Castellana de la Alianza Francesa, que contó la presencia de la actriz Mariaca Semprún; del escritor Leonardo Padrón; de la productora del musical, Claudia Salazar, y de profesores, alumnos y comunidad que adora la cultura francófona.
En la piel de la môme
Uno de los primeros nombres artísticos de Edith Piaf fue La môme Piaf o la niña Piaf. Este período de la vida de la cantante es uno de los pasajes oníricos del musical Piaf: Voz y Delirio, en el cual Semprún narró en primera persona la vida de Piaf en 18 canciones que manifiestan el universo expresivo de la artista y su singular manera de cantar las melodías que llenaron los cabarets más famosos del mundo.
Con un texto original de Leonardo Padrón y la dirección escénica de Miguel Issa, nació en Caracas el musical que sirvió para descifrar a una leyenda que nació en los suburbios, creció en la desventura, padeció el amor y la droga, la guerra y la enfermedad y terminó por seducir a generaciones enteras amantes de la música.
Para Mariaca Semprún fue todo un reto personal interpretar a la cantante parisina, sobre todo por el empleo del idioma francés. “El canto lírico requiere estudiar varios idiomas y el francés llegué a tocarlo, pero me dio pánico pues es un idioma muy difícil. Cuando me hicieron la propuesta de hacer Piaf me vino esta inquietud, pues el idioma tiene una complejidad en la pronunciación que no la tiene otro”, comentó la artista.
Por su parte, Padrón agregó que “presentar la magia de Piaf para nosotros fue muy satisfactorio. Lo que recibíamos de la gente era un entusiasmo, una suerte de asombro en un país tan golpeado. Fuimos un equipo comprometido, pusimos toda la energía posible y trabajamos con rigor para hacer algo que se acercara al arte, para celebrar la belleza y homenajear a Piaf”.
Fuente El Nacional
Musical Piaf, Voz, Delirio, estudio del francés, cultura, Venezuela
Originally posted 2016-12-14 14:46:13.